Argentina anunció hoy que llegó a un acuerdo con tres grupos de acreedores para reestructurar 65 mil millones de dólares en deuda extranjera, lo que ayudaría a la nación sudamericana a salir de una cesación de pagos y a aliviar a una economía en recesión por más de dos años.
El Ministerio de Economía expresó en un comunicado que ajustaría algunas fechas de pago y cláusulas legales para mejorar lo que se había anunciado como la oferta «final», realizada a principios de julio, sin modificar el pago general de capital o intereses.
Argentina y sus principales acreedores llegaron a un acuerdo en el día de la fecha que les permitirá (…) apoyar la propuesta de reestructuración de deuda de Argentina y otorgarle a la República un alivio de deuda significativo», afirmó el Ministerio de Economía argentino en un comunicado.
Entre los acreedores que aceptaron el acuerdo se destacaban el Grupo Ad Hoc, el Comité de Acreedores de Argentina y el Grupo de tenedores de bonos Exchange, trío que se había asociado para oponerse a una oferta previa del Gobierno, lo que provocó un estancamiento en las negociaciones y amenazaba la posibilidad de un eventual acuerdo.
El Ministerio argentino también dijo que extenderá hasta el 24 de agosto el plazo que expiraba este martes para que los acreedores acepten formalmente el nuevo acuerdo.
Argentina, uno de los principales productores mundiales de alimentos, cayó en su novena cesación de pagos en mayo y se encamina a una contracción estimada en su económica de alrededor del 12% para 2020 en medio de la pandemia del coronavirus.
No hubo respuesta inmediata de confirmación de un acuerdo por parte de los grupos de acreedores.
CAMBIOS EN FECHAS DE PAGO
Como parte del acuerdo, el Gobierno manifestó que ajustaría algunas fechas de pago de los nuevos bonos establecidos en la oferta enviada a los tenedores de bonos el 6 de julio. Esto no incrementaría el monto establecido de pagos de capital o intereses para Argentina, pero mejoraría la propuesta para los acreedores, añadió.
Una cuestión clave durante las conversaciones para la renegociación fueron las llamadas cláusulas de acción colectiva (CAC), que determinan cómo se pueden realizar futuros cambios a los acuerdos de bonos.
Algunos tenedores de bonos, temiendo que Argentina intentara utilizar las CAC para adoptar la estrategia ‘Pac-Man’ de intentar incorporarlos uno a la vez, habían establecido contactos informales con organismos globales, incluido el Fondo Monetario Internacional (FMI), para tener su respaldo para poder modificar las cláusulas legales. (i)
Fuente:www.excelsior.com.mx