La paloma mensajera de un criadero belga fue adjudicada el domingo en una subasta a un comprador chino a un precio récord de 1.6 millones de euros (1.8 millones de dólares), durante una venta organizada por internet por la plataforma especializada Pigeon Paradis (Pipa).
New Kim, una hembra de un reconocido criadero de la región de Amberes (norte), se convierte en el ave de su especie más cara en el mundo, venciendo a otro pájaro de Flandes, el macho Armando, vendido por 1.25 millones de euros (1.47 millones de dólares) en 2019 al mismo comprador, cuya identidad no fue precisada, según los dirigentes de Pipa.
Considero que es un récord mundial, nunca ha habido una venta a un precio así, que este acreditado por un documento oficial», declaró Nikolaas Gyselbrecht, fundador y director general de Pipa.
No pensaba que pudiésemos alcanzar esta suma. Seguramente [el comprador]va a querer aparearla con machos», añadió.
Gyselbrecht destacó que New Kim provenía de un linaje prestigioso.
PALOMAS DE ÉLITE
A sus dos años, esta paloma, cuyo precio de salida fue de 200 euros (unos 237 dólares), es ya una habitual de los concursos de palomas.
En 2018, ganó el título de «As Pigeon National Grand Demi-Fond Pigeonneaux» gracias, sobre todo, a sus actuaciones en dos concursos en Francia, según el currículo subido a internet por Pipa.
Las palomas de élite europeas han ganado cada vez mayor fama en el mundo en los últimos años, en especial en China, donde la colombofilia puede generar enormes beneficios.
VOLANDO ALTO
El interés de ricos compradores, de Asia o de países del Golfo, disparó los precios por estos «campeones», cuya actuación consiste en volver el primero al nido, de manera instintiva, tras haber recorrido a veces cientos de kilómetros.
Se consideraba en declive, antes de experimentar un resurgimiento gracias, en parte, a estas compras especulativas.
Según Gyselbrecht, Bélgica concentra unos 20 mil criaderos de palomas destinadas a concursos de alto nivel.
New Kim fue adiestrada en el criadero de Gaston y Kurt Van De Wouwer, en Berlaar, cerca de Amberes. Los dos criadores, padre e hijo, vendían el domingo la totalidad de su «colonia». (I)
Fuente:www.excelsior.com.mx