Después de haber tenido la tasa más alta de covid-19 en el sureste asiático, Singapur prácticamente ha erradicado el virus tras 14 días sin ningún caso local nuevo el martes, cuando anunció que había extinguido el último brote de contagios en una residencia de trabajadores.
Los apretados dormitorios de los jóvenes inmigrantes que trabajan por salarios bajos, procedentes principalmente de Bangladesh, India y China, fueron el centro de la espiral de casos de la ciudad–Estado a principios de este año.
Si bien Singapur no ha comunicado ningún caso local durante dos semanas, se han registrado algunos casos de personas infectadas llegadas del extranjero que han sido aisladas inmediatamente, según las autoridades.
Singapur fue uno de los primeros países en reportar un caso de covid-19 fuera de China, donde el virus apareció por primera vez, el 23 de enero. Desde entonces ha registrado más de 58 mil casos, pero casi todos se han recuperado y su tasa de mortalidad es la más baja del mundo con sólo 28 muertes.
La gran mayoría de los casos de Singapur se produjeron en dormitorios de trabajadores. Las autoridades impusieron estrictas cuarentenas en las instalaciones, lo que provocó críticas de los grupos de derechos humanos.
Pero aún así se necesitaron muchos meses para sofocar los brotes en estos ambientes, incluso cuando los casos en la comunidad en general se mantuvieron bajos.
El martes fue la primera vez que Singapur dijo que no tenía ningún brote de contagios en toda la isla desde la pandemia llegó en el país.
Cuando los contagios diarios alcanzaron su punto máximo en abril, la ciudad-Estado tuvo la mayor cantidad de casos de la enfermedad del sudeste asiático. Desde entonces, los casos en Indonesia y Filipinas han sobrepasado sus cifras.
Aunque la vida ha vuelto a la relativa normalidad, el uso de cubrebocas es obligatorio, existen estrictas normas de distanciamiento social y las fronteras permanecen en gran medida cerradas. (I)
Fuente:www.excelsior.com.mx