El servicio urbano de buses no opera la mañana de este lunes 10 de mayo del 2021 en vías como la avenida De la Prensa, en el norte de Quito, ruta del Corredor Central Norte, por una suspensión del servicio de buses que se inició a las 00:00.
La medida de hecho ha afectado a la movilidad en toda la capital ecuatoriana. Desde tempranas horas, aceras de la avenida Simón Bolívar y Panamericana, se coparon con filas de ciudadanos en busca de un vehículo que los traslade a distintos destinos.
Sin la flota completa de buses sirviendo a la capital, hubo malestar entre los usuarios desde temprano. “Sí hay unidades que salen desde el valle de Los Chillos. Los problemas se presentan cuando llegamos al playón de La Marín. Ya voy media hora esperando”, manifestó Álex Yugcha, quien se dirigía a su trabajo en las avenidas Mariana de Jesús y 10 de Agosto.
Cecilia Escobar no encontró un bus que la llevara a su oficina en la av. República. “Los taxis pasan llenos”. Johana Jaramillo se atrasó al trabajo. “Voy 20 minutos atrasada, no sabía que hoy se paralizó el servicio de transporte público”.
En algunos sectores, los taxistas se organizaron para dar servicio de taxi ruta a diferentes puntos de Quito. Desde La Marín se cobraba USD 1,50 y 2 a quienes necesitaban trasladarse a la La Ofelia, norte del Distrito Metropolitano.
“Por la falta de transporte estamos trabajando fuerte. Los agentes metropolitanos nos dejan trabajar en La Marín porque la gente necesita movilizarse, en el norte no nos permiten”, dijo el taxista Álex Enríquez.
Pocos buses recorrieron la ciudad. Los provenientes del valle de Los Chillos llegaban repletos de pasajeros y se formaban largas filas en los accesos de la Ecovía y los corredores. Nadie respetaba los distanciamientos y la gente se quejaba por la saturación del servicio.
En el norte y sur también hubo malestar entre la gente. En las paradas se acumularon los usuarios a la espera de los vehículos. Lo mismo ocurrió en el intercambiador que une a la autopista General Rumiñahui con la avenida Simón Bolívar.
“Me urge ir la La Ofelia, llevo media hora atrasada a mi trabajo”, manifestó Karen Chicaiza.
Usuarios reportaban que intentaron tomar taxis y vehículos particulares, pero los conductores pedían precios elevados.
La falta de buses de este lunes se dio después de que la Cámara de Transporte del Distrito Metropolitano de Quito (CTDMQ), que agrupa a las operadoras de servicio público urbano, rural y combinado, anunciara el viernes 7 de mayo que desde el inicio de esta semana no podrán salir a prestar su servicio y suspenderán sus actividades por la falta de recursos económicos.
“Lo hacemos por voluntad propia, no es un paro, sino una suspensión pacífica de nuestras actividades”, expresó José Santamaría, presidente de ese organismo, en medio de los aplausos de sus colegas. Según el dirigente, no cuentan con recursos para la compra de combustible y el mantenimiento de los vehículos.
La semana pasada, Santamaría solicitó al presidente Lenín Moreno que congele el precio de los combustibles. Los dirigentes de las operadoras manifestaron que el incremento mensual del diésel representa un 45% del costo en sus operaciones, desde que el Gobierno adoptó la medida de ajustes mensuales, conforme al precio internacional del petróleo. Aseguró que el sector del transporte urbano no ha recibido repuestas a los pedidos realizados semanas atrás.
No todos los buses paralizaron el servicio. Jorge Yánez, presidente de la Asociación de Empresas de Transporte Urbano de Quito, señaló que su gremio no tuvo conocimiento sobre la medida y, por lo tanto, no fueron parte de la misma. La asociación que dirige Yánez cuenta con 18 operadoras del transporte urbano en Quito.
El servicio municipal de transporte sí opera. Las unidades articuladas del Trolebús -recorre la av. 10 de Agosto, Guayaquil, Maldonado y Teniente Hugo Ortiz-, así como las de la Ecovía –av. 6 de Diciembre, Gran Colombia, Pichincha, Velasco Ibarra, Napo y Maldonado– ofrecían su servicio a las 08:45.
Sin embargo, la Empresa Pública Metropolitana de Transporte de Pasajeros de Quito informó que “empezamos a tener problemas con rutas alimentadoras por cierres viales y disturbios generados por unidades convencionales en la calle Molineros, en el norte; Fundeportes y Hacienda El Carmen, en el sur”.
Luis Calvopiña, dirigente de la Cámara de Transporte de Quito, dio declaraciones esta mañana y señaló que protestarán frente al Municipio y frente a Carondelet.
“Sabemos que el alza del combustible es por un decreto ejecutivo, lo tenemos claro. Entonces vamos a exigirle al Gobierno Nacional que tiene que volver ese combustible a USD 1,03, sino ellos sabrán cómo resolverlo”, dijo.
Añadió que no es posible subir el costo de un insumo usado a diario por los transportistas y aseguró que al momento el alza ha tenido un impacto y ha aumentado en un 50% los gastos en esos rubros.
Del otro lado, en cambio, la protesta será contra el Municipio, debido al concurso para elegir los operadores de las nuevas rutas y frecuencias.
El dirigente señaló que no es posible que luego de haberles hecho invertir tanto dinero en sus unidades (porque deben cumplir ciertos parámetros para conseguir el alza del pasaje a USD 0,35), hagan un concurso que podría dejar por fuera a varias operadoras.