La maña de este 25 de mayo la profesional alcanzó el premio Ortega y Gasset 2021 a la Mejor historia o investigación periodística.
Un páramo desértico fue el escenario que se dividió en cuatro y que alberga la historia que Isabela Ponce, periodista del medio digital GK, publicó en febrero del 2020 acerca de cuatro mujeres que llevan agua a sus cultivos, combatiendo la adversidad climática para poder producir; Las mujeres que le ganaron al desiertose convirtió en la Mejor historia o investigación periodística de los premios Ortega y Gasset en su edición número 38.
Así como esas mujeres que siembran, riegan y cosechan, Isabela Ponce sembró, regó y ahora cosecha reconocimiento por su trabajo periodístico. “La historia llegó a mí por mi amiga y talentosísima fotógrafa Ana María Buitrón, quien había conocido a dos de ellas. Cuando me contó que las había conocido, juntas decidimos armar un proyecto para aplicar a un fondo para cubrir el cambio climático en América Latina.
Y cuando ganamos ese fondo nos propusimos explicar el cambio climático desde las historias de vida de estas cuatro mujeres. Me motivó poder contar la fortaleza de las mujeres rurales, cuyo trabajo pocas veces es reconocido”.
“El fondo se llama Fondo ODS para el cambio climático del Centro ODS de la Universidad de Los Andes, de Colombia”, cuenta la comunicadora, y explica que Las mujeres que le ganaron al desierto es parte de un proyecto multimedia que tiene fotos, videos, gifs, fotoaudios. Apunta que “el proyecto se llama igual: Las mujeres que le ganaron al desierto y con diferentes formatos narran las historias de cuatro mujeres campesinas que se adaptan al cambio climático en el desierto de Jubones; entonces lo que hace el proyecto es narrarlo en diferentes formatos”.
Ponce expresa su contento por recibir el premio, ya que le “encantó” reportear la historia, además de poder plasmar la labor de esas “poderosas mujeres”. Recolectar esa información fue un proceso de siete días. De Quito a Cuenca en avión, de Cuenca a Santa Isabel en camioneta; esta última locación la usaron de base y todos los días salían a las 06:00 hacia las comunidades donde viven Blanca Atre, Adriana Tapia, Daisy Dota y Mélida Romero, las protagonistas. “(…) salíamos de la carretera y teníamos que adentrarnos en estas enormes y secas montañas que están en Jubones y luego había un momento que solo había café y mucho polvo… terminábamos las jornadas agotadas (…)”, cuenta también refiriéndose a Ana María Buitrón, encargada de las “increíbles”fotografías y videos.