En un ataque que ha conmocionado a la ciudad de Manta, fue asesinado Geamil Rivera Saltos, quien era cuñado del excabecilla de Los Choneros, Jorge Luis Zambrano, alias Rasquiña.
El crimen tuvo lugar alrededor de las 17:00 horas del lunes 18 de marzo en la avenida La Cultura, cerca de la concurrida zona comercial de Nuevo Tarqui.
Según informes de la Policía Nacional, Rivera Saltos fue blanco de cinco disparos en la cabeza, efectuados desde la ventana del conductor, mientras se encontraba solo.
Las autoridades revelaron que Rivera Saltos tenía antecedentes penales, siendo procesado en 2020 por el delito de tenencia y porte ilegal de armas. Como parte de su proceso judicial, estaba obligado a presentarse periódicamente ante la justicia. No obstante, al momento se desempeñaba como supervisor de la Agencia de Tránsito Municipal de la localidad.
Familiares de Rasquiña
Este suceso arroja luz sobre la compleja red de relaciones familiares en el mundo del crimen organizado. Rivera Saltos era cuñado de Rasquiña, el excabecilla de Los Choneros que fue asesinado en diciembre de 2020, meses después de haber recuperado su libertad.
Asimismo, su hermana, Samara Rivera Saltos, quien fue esposa de Rasquiña y es madre de dos hijos, se encuentra actualmente procesada por presunta asociación ilícita en una investigación que se inició en 2020.
Sin embargo, la audiencia de juicio oral que estaba programada para el 16 de febrero no se llevó a cabo y ha sido aplazada hasta el 6 de junio de 2024.
Mientras que, con 14 impactos de bala fue asesinado Víctor Alfonso Zambrano González, alias “La Rana”, el 9 de junio de 2022, en el sector de Playita Mía, en Manta, cuando dos sicarios llegaron al lugar e iniciaron el ataque.
Sobre la víctima de 31 años se conoció que se trataba del hermano menor de Jorge Luis Zambrano.
En diciembre de 2020, bajo la misma modalidad, alias ‘Rasquiña’, quien unos meses antes había salido con prelibertad de la prisión de Latacunga, fue asesinado dentro de un centro comercial, cuando este se encontraba en una cafetería en compañía de su esposa, hija y personal de custodia.
El violento asesinato de Geamil Rivera Saltos representa otro capítulo en la historia de violencia y crimen que afecta a la ciudad de Manta, en medio del estado de excepción que rige desde enero.