La Prefectura de Tungurahua está enfocada en la adquisición de tierras de páramo para su conservación y protección, con el objetivo principal de salvaguardar los ecosistemas de esta área crucial.
Estas acciones no solo garantizan la preservación de los páramos, sino que también aseguran la protección de las fuentes de agua que alimentan los ríos y arroyos, incluyendo las represas.
Según Carlos Tabares, director de Recursos Hídricos y Conservación Ambiental, la actual administración provincial no posee tierras de páramo, pero ha establecido convenios con comunidades locales para colaborar en su preservación.
Actualmente, están involucrados con 60 comunidades mediante acuerdos sustentables, comprometiéndose a respetar las áreas de páramo a partir de los 3.800 metros sobre el nivel del mar.
Sin embargo, hubo incumplimientos en 2023, como en Llangahua, parroquia de Pilahuín, donde de las 12.000 hectáreas destinadas al cuidado del páramo, 9.000 fueron utilizadas para cultivos y cría de animales, dejando apenas 3.000 para la conservación.