En una planta procesadora en Cuenca, se encontraron condiciones deplorables de higiene, incluyendo paredes con grasa, agua con tinta amarilla, canales sin rejilla y equipos sucios. La inspección realizada por la Agencia Nacional de Regulación, Control y Vigilancia Sanitaria (ARCSA) reveló que se elaboraban papas fritas, chifles, maní de sal, maní de dulce y otros snacks en un entorno totalmente insalubre.
Los alimentos estaban en contacto directo con el suelo y los snacks ya preparados se almacenaban en envases inapropiados. Además, se descubrió el uso de colorante amarillo en las papas fritas, un ingrediente no especificado en las etiquetas y que puede causar reacciones alérgicas en personas sensibles.
Como consecuencia de estas irregularidades, la planta fue clausurada por la ARCSA, que colocó sellos como medida sancionatoria. La clausura se mantendrá hasta que se implementen las medidas correctivas necesarias para garantizar la seguridad en el procesamiento de los alimentos.
Esta acción se respalda en la Ley Orgánica de Salud, que prohíbe el procesamiento y manipulación de alimentos en condiciones no higiénicas.
Los ciudadanos pueden contribuir a detectar y denunciar este tipo de irregularidades sanitarias utilizando la aplicación gratuita Arcsa Móvil, disponible en Play Store y Apple Store.