Luego de que 32 exmandatarios criticaran a los gobiernos de Brasil, Colombia y México por apoyar al régimen de Nicolás Maduro, los presidentes Luiz Inácio Lula da Silva de Brasil y Gustavo Petro de Colombia sugirieron alternativas para enfrentar la crisis en Venezuela.
Lula da Silva insistió en la necesidad de que las autoridades venezolanas publiquen las actas de las elecciones del 28 de julio de 2024 y propuso dos posibles soluciones: la formación de un Gobierno de coalición o la realización de nuevas elecciones.
Además, el mandatario brasileño declaró que Maduro, proclamado vencedor por el Consejo Nacional Electoral (CNE), debe dar una explicación al mundo, y sugirió que convocar a nuevas elecciones podría ser una salida viable, con la inclusión de un comité electoral que incluya a miembros de la oposición y observadores internacionales.