En medio de la severa crisis eléctrica que enfrenta Ecuador, con cortes de luz que alcanzan hasta 10 horas diarias, el Gobierno ha decidido no avanzar con el alquiler de una segunda barcaza o planta eléctrica flotante.
Inicialmente, se había planeado lanzar una licitación para alquilar un buque capaz de generar 250 megavatios de potencia.
Sin embargo, la ministra de Energía y Minas en funciones, Inés Manzano, anunció que, en lugar de esto, se adquirirá infraestructura de generación móvil que será instalada en tierra. «Estamos haciendo la compra porque esto va a quedar al país», afirmó Manzano durante una entrevista en Teleamazonas, subrayando la decisión del presidente Daniel Noboa de priorizar esta opción.
Se espera que estas plantas móviles, adquiridas en dos bloques de 350 y 800 megavatios, lleguen al país para mediados de noviembre. Desde septiembre, Ecuador ya cuenta con la barcaza Emre Bey, que ofrece 100 megavatios de potencia y está conectada a la subestación eléctrica Las Esclusas, en Guayaquil.