La policía italiana ha desmantelado este miércoles 6 de noviembre una organización criminal internacional que importaba grandes cantidades de cocaína de Ecuador, a través de una red que también operaba en Colombia, y las enviaba a varios puertos europeos para su distribución, informó la Guardia de Finanzas.
En total han sido detenidas 23 personas en Italia y otras 7 en España, Albania, Francia y Rumanía, acusadas de pertenecer a una asociación delictiva ligada al tráfico internacional de sustancias estupefacientes e involucradas en delitos de importación, transporte y venta de drogas, explicó la policía financiera.
Además, en la maxioperación policial, en la que participaron 200 agentes, se han incautado de dos toneladas de cocaína, 45 kilogramos de hachís y 20 de marihuana, que en total costarían en el mercado unos 70 millones de euros.
Así funcionaba la estructura
Las investigaciones permitieron descubrir «una amplia red criminal dedicada a la importación de grandes cantidades de cocaína de Sudamérica, enviadas por una estructura criminal autónoma, ubicada en Ecuador y que también operaba en Colombia», se indica en un comunicado.
La droga era enviada a varios puertos del noroeste de Italia -Livorno, Génova y Savona-, así como a puertos de otros países, como Barcelona, Amberes, Rotterdam y San Petersburgo, desde donde se procedía a su distribución.
Los cargamentos llegaban desde Sudamérica a Europa en contenedores que se almacenaban en los puertos y después este grupo criminal los recogían mediante dispositivos de radiolocalización, ya que las sustancias se ocultaban entre frutas exóticas o dobles fondos.
Detenidos tenían vínculos con la mafia italiana
Los detenidos, en prisión preventiva, son de nacionalidad italiana, albanesa, rumana y ucraniana y mantenían relaciones con la Camorra, la mafia napolitana, y la ‘Ndrangheta, la calabresa.
También tenían vínculos con asociaciones criminales albanesas que operaban en Italia y tenían ramificaciones en Bélgica, Albania, Francia, Alemania, Ecuador y Colombia.
En Albania también se están llevando a cabo operaciones paralelas cuyos resultados finales aún se desconocen.
En las investigaciones han colaborado la policía y la justicia de Ecuador y Albania, así como los organismos internacionales europeos Eurojust y Europol.