El baño de la Cruz en conmemoración a la Semana Santa se cumplió esta tarde en Ballenita.
La procesión desde la cabecera cantonal de Santa Elena tuvo poca concurrencia; sin embargo en Ballenita cientos de personas hicieron caso omiso al pedido de no asistir e incluso no respetaron el distanciamiento.
Esta es una tradición que cumplió 89 años y en esta ocasión la cruz fue sumergida al agua por seis sacerdotes, pues antes de la pandemia, quienes la ingresaban al mar eran pescadores.