En el segundo día del feriado por la Batalla de Pichincha, este balneario de la provincia de Manabí, en la Costa del Ecuador, estuvo lleno de personas entre habitantes de la zona y turistas de diversas partes del país.
El Municipio de Portoviejo, capital manabita, informó que para evitar aglomeraciones se decidió no permitir que más personas accedan.
Esto sucede porque el atractivo llegó al límite de su aforo. La capacidad permitida por las autoridades es de 1 300 personas y 320 vehículos.
En imágenes que difundió el Municipio se observa a los turistas en la arena y junto a coloridas carpas.
Silvio Larrea, funcionario del Cabildo, recordó que este límite se mantiene desde que en septiembre del 2020 se autorizó la reapertura progresiva de la playa en el marco de la pandemia por el covid-19. Para que se cumpla esta disposición, agentes de tránsito y policías se instalaron en el acceso al balneario.
Algunos turistas que intentaron ingresar tomaron el desvío hacia Manta para vacacionar. Ricardo Meza, habitante de Portoviejo, indicó que viajó a las 14:00 con destino hacia Crucita, pero a esa hora ya no le permitieron ingresar.
Luego intentó ir al poblado de la Boca y tampoco pudo. Con su esposa y dos hijos tomó rumbo hacia la playa El Murciélago, en el puerto mantense. Este atractivo también tuvo más movimiento con relación al día anterior cuando llegaron pocos turistas.
Los propietarios de los restaurantes en ese malecón coincidieron en que hay más presencia de visitantes locales que de turistas nacionales.
Jessenia Cedeño, operadora turística, aseguró que estas bajas visitas se esperaban, debido a que no se dio tiempo para organizar promociones y ofertas. Este sector sigue golpeado y registra un decrecimiento de hasta un 5% en la ocupación hotelera, lo cual se ha reflejado en este asueto, según la Cámara Provincial de Turismo.