En la sesión ordinaria del 8 de agosto de 2022, el Pleno del Consejo de la Judicatura (CJ) destituyó del cargo a una servidora por sus actuaciones como jueza de la Unidad Judicial Penal con sede en la parroquia Iñaquito, norte de la capital.
La servidora incurrió en la infracción disciplinaria gravísima tipificada en el artículo 109 numeral 7 del Código Orgánico de la Función Judicial: “Intervenir en las causas que debe actuar, como Juez, fiscal o defensor público, con dolo, manifiesta negligencia o error inexcusable”.
Lo dictaminó la Sala Especializada de lo Penal, Penal Militar, Penal Policial y Tránsito de la Corte Provincial de Justicia de Pichincha, en declaración jurisdiccional previa del 27 de julio de 2021.
Según consta en el expediente disciplinario MOT-0968-SNCD-2021-JH, la exservidora violentó el principio de debida diligencia y dejó sin efecto sentencias dictadas en procedimiento abreviado, que fueron impugnadas en el momento procesal oportuno por los sujetos que intervenían en el proceso mediante recursos que no fueron atendidos con la celeridad que el caso ameritaba, provocando un daño a la administración de justicia.