Una pesadilla completa fue el naufragio de la embarcación Angy que se registró la noche del domingo 25 de septiembre, en Galápagos.
Quienes lograron ponerse a salvo y ayudar a salvar la vida de quienes se ahogaban por el hundimiento de la lancha, cuentan sus testimonios. Y es que el número de fallecidos pudo haber sido mayor a cuatro.
Según Kengy Romero la lancha presentó problemas desde el inicio del viaje, además los viajeros no contaban con chalecos salvavidas.
Romero cuenta que él salvó a una señora y una niña, «el mar se llevó rapidamente a la gente» dice.
El hundimiento de la lancha se produjo cuando cubría la ruta Puerto Villamil – Isla Isabela y Puerto Ayora – Isla Santa Cruz, según el Gobierno.
En la embarcación viajaban españoles, estadounidenses, israelitas, suizos y alemanes. De acuerdo con las declaraciones del alcalde de Santa Cruz, Ángel Yánez, cuatro españolas «fueron rescatadas en la noche» y se encuentran sin novedad.
Las víctimas mortales son un extranjero y tres ecuatorianos.