El tifón Yagi ha causado la muerte de 87 personas y dejó a 70 más desaparecidas en Vietnam, afectando principalmente las provincias del norte como Cao Bang y Lao Cai.
Además, más de 750 personas resultaron heridas, y miles de familias han perdido sus hogares debido a las intensas lluvias y deslaves que han destruido 48,000 viviendas y 150,000 hectáreas de arrozales.
Aunque la intensidad del tifón ha disminuido, el riesgo de inundaciones y corrimientos de tierra sigue amenazando las zonas rurales y urbanas, con Hanói en alerta por un posible desborde del río Rojo.