El Ministerio de Turismo ha anunciado que el feriado por el Día de los Difuntos será trasladado al viernes 1 de noviembre, lo que permitirá a los ecuatorianos disfrutar de un largo asueto de cuatro días, combinando esta celebración con la conmemoración de la Independencia de Cuenca.
Aunque el 3 de noviembre, día de la independencia de la capital de Azuay, cae en domingo, el descanso oficial se traslada al lunes 4 de noviembre, conforme a la Ley de Feriados.
Este feriado será uno de los más extensos del año, después del Carnaval, y ocurrirá en medio de la crisis energética que atraviesa el país.
El Gobierno Nacional ha informado que, para mitigar los efectos, los cortes de luz se reducirán en duración, aunque se mantendrán hasta por cuatro horas diarias entre el 4 y el 10 de noviembre.