El presidente de Ecuador, Lenín Moreno, anunció anoche que el país recibirá en los próximos tres meses un total de 7.150 millones de dólares de organismos internacionales.
Entre ellos, mencionó al Fondo Monetario Internacional, el Banco Mundial, el Banco Interamericano de Desarrollo, de la Corporación Andina de Fomento y, además, de entidades financieras chinas.
En un mensaje a la nación, Moreno destacó que la llegada de estos recursos es producto de acuerdos logrados -mediante negociaciones justas- con los acreedores de bonos de la deuda y con China.
Precisó que el programa con el Fondo tiene una duración de 27 meses e incluye desembolsos por 6.500 millones de dólares.
Dicho crédito otorgado a Ecuador tiene 10 años de plazo, con cuatro años de gracia, a una tasa mínima de 2,9 % de interés. «¡Sin duda alguna, excelentes condiciones!», enfatizó el gobernante al recordar que recibió el país con problemas económicos en 2017..
Sobre el destino de los recursos, resaltó que estos permitirán cubrir los gastos de este año, específicamente, para atender las necesidades de la población en salud y educación.
Sin embargo, aclaró que dichos fondos no son suficientes para atender todos los problemas que enfrenta el país.
Y anunció que los 2.000 millones de dólares del primer desembolso ya están en las cuentas del país y servirán para aliviar la mayor crisis económica que ha enfrentado el país en su historia.
Los recursos han permitido que el Gobierno Nacional se encuentre «al día» en los sueldos de los servidores del sector público, reza un comunicado de la Presidencia.
Por otro lado, anunció que se pagará a los 17.000 pequeños y medianos proveedores del Estado, con quienes se mantienen deudas de hasta 500.000 dólares.
Para ampliar el sistema de protección social, los recursos también permitirán cumplir en su totalidad con los Centros de Desarrollo Infantil, de Desarrollo Social y otros cooperantes de proyectos de inclusión social.
Adicionalmente, el Gobierno pagará lo adeudado a 821 juntas parroquiales y cubrirá el modelo de equidad territorial de los municipios pequeños.
En cuanto a los municipios medianos y grandes y a los gobiernos provinciales, se les hará «un pago importante para reducir el atraso que mantenía el Estado con estos», anotó.
Asimismo, los fondos permitirán efectuar el pago de obligaciones pendientes a los más de 3.000 extrabajadores de las empresas públicas liquidadas.
Además, se retomará el pago en efectivo de la compensación para miles de jubilados y también se efectuará la devolución de impuestos a 350.000 ecuatorianos, sobre todo, a ciudadanos con discapacidad y de la tercera edad.
Finalmente, para fortalecer la reactivación productiva del país, se destinarán 300 millones de dólares para el programa «Reactívate Ecuador», que otorga créditos en condiciones favorables.
Asimismo, en consecuencia con la política del Gobierno Nacional de proteger a quienes realmente lo necesitan, reiteró que el destino de estos recursos tiene un sólido componente social.
«Con una mejor focalización, llegaremos con apoyo monetario a más gente pobre y aumentaremos la cobertura de nuestra red de protección social», explicó.
Recordó que actualmente un millón de hogares en situación de vulnerabilidad, reciben bonos y pensiones por parte del Estado para contribuir a su protección, y anunció que hasta diciembre de este año, 250.000 familias más recibirán estas ayudas y, hasta el primer trimestre de 2021, se sumarán otros 200.000 hogares.
Una vez anunciadas estas acciones, el Jefe de Estado recordó que el país debe mantener un buen y eficiente manejo de las finanzas públicas, para poder continuar gozando de confianza y credibilidad por parte de los organismos multilaterales.
En este sentido, aseguró que el Gobierno Nacional continuará protegiendo la salud y los medios de subsistencia de la ciudadanía y, al mismo tiempo, restablecerá la estabilidad macroeconómica del país, con el objetivo de asegurar la sostenibilidad financiera.
«¡Es hora de mirar al futuro con mucha ilusión, pero también con mucha responsabilidad!», acotó.
Explicó que el Gobierno prevé alcanzar un superávit global del sector público no financiero del 0,6 % en el 2022 y conseguir, paulatinamente, un nivel de deuda sobre el Producto Interno Bruto (PIB) menor al 57 % para 2025.
Además, mejorar la transparencia en las auditorías del Banco Central y fortalecer su autonomía; y, luchar incansablemente contra la corrupción, a través de una legislación que criminalice actos de este tipo.
Anotó que para los próximos gobiernos, se plantearán soluciones para hacer sostenible la seguridad social, garantizar una mayor progresividad en el sistema impositivo, brindar más transparencia a las cuentas públicas, entre otros aspectos.
«¡Hoy estamos en el primer día de la recuperación total de Ecuador!», opinó el gobernante. (I)
Fuente:www.eldiario.ec