Los sicarios fallaron. La misión era acabar con la vida del juez de la Unidad Judicial Multicompetente del cantón San Lorenzo, norte de Esmeraldas, Óscar Cuenca, por lo menos así lo dejaron entrever en el modo operandi.
Desde una motocicleta dos hombres llegaron la mañana de ayer hasta los exteriores de la casa del magistrado y dispararon en siete ocasiones –según la hipótesis de Fiscalía- contra el vehículo blanco con vidrios polarizados de la autoridad de justicia, quien iba a su lugar de trabajo, de acuerdo con el Consejo de la Judicatura (CJ).
La entidad emitió un comunicado en el que “rechaza enfáticamente el atentado” y asegura que el administrador de justicia está –luego del fallido atentado- con resguardo policial. Y se conoció que fue ingresado al Sistema Nacional de Protección y Asistencia a Víctimas, Testigos y otros Participantes en el Proceso Penal (Spavt); para garantizar su seguridad por ahora las audiencias las hará de forma telemática.
¿Amenazados de muerte?
En la denuncia que presentó ayer el juez Óscar Cuenca, no revela si tiene amenazas en firme, pero sí que está manejando algunos casos fuertes, los cuales no se han hecho público. Lo que no se revela es que si el atentado tiene relación directa con su función.
La Fiscalía tras conocer los hechos asignó al investigador José María Mosquera. Él en territorio hizo el peritaje del automotor donde se evidenciaban los impactos de bala que ingresaron por la puerta trasera del lado del chofer y el vidrio del mismo lado.
Para el levantamiento de evidencias el Fiscal contó con la asistencia de la Policía Nacional, juntos encontraron casquillos que quedaron sobre la calle adoquinada del norteño cantón de Esmeraldas.
Tras lo ocurrido saltan interrogantes, entre ellas: ¿los jueces de la frontera norte demandan de protección especial por la complejidad de los casos que manejan?, ¿los autores intelectuales son parte de la delincuencia común o grupos subversivos? ¿cuántos jueces están amenazados de muerte?.
Mientras se despejan esas dudas que son parte de las investigaciones que lidera Fiscalía, “el CJ repudia cualquier acto de intimidación o amedrentamiento a las y los jueces que, en el marco de la independencia judicial, trabajan para garantizar la tutela efectiva de los derechos ciudadanos, así como para fortalecer la seguridad ciudadana y la lucha contra la corrupción”. (I)
Fuente:www.lahora.com.ec